“Yo y mi novio estamos juntos desde hace cerca de un año, y normalmente nos vemos sólo durante los fines de semana.
Por ahora, las cosas van dentro de todo bien. Soy una persona fiel y no deseo perder ni traicionar a mi hombre. Por el otro lado, todas las veces que pasamos las vacaciones juntos -incluso cuando se trata sólo de un fin de semana largo- siempre me surgen deseos de irme con otro.
Durante la semana estoy sola, y puedo hacer aquello que deseo, según mi gusto y placer, y en esos días no veo la hora de estar junto a mi novio. Así funciona hasta las cosas hasta las siguientes vacaciones, cuando vuelve a comenzar todo de nuevo. ¿Dónde me estoy equivocando? ¿Es normal que tenga deseos de una aventura después de cada viaje?”
Patricia, 28 años
Página de "aventuras" galardonada
Podemos tranquilizarte. Muchas parejas viven exactamente esta misma experiencia. Según las estadísticas, la frecuencia de las traiciones aumenta efectivamente después de un viaje transcurrido con la pareja. Los motivos en la base de este fenómeno son variados y de naturaleza individual. Sin embargo, algunas de las causas son recurrentes y se presentan en igual medida en todas las parejas.
Demasiada proximidad durante las vacaciones
Durante las vacaciones se pasa mucho más tiempo juntos – mucho más tiempo juntos que en la vida cotidiana, en la cual a menudo cada uno cuenta con intereses y actividades propios. Tanta cercanía tiende a convertirse rápidamente en demasiado. De pronto, todas las costumbres de la pareja fastidian más que lo común y uno se encuentra siendo intolerante frente a cada movimiento o acción del otro. Basta una pequeñez para que pronto surja un conflicto. Si luego no se cuenta con la habilidad para rever las propias acciones, entonces la situación puede escalar rápidamente.
Peleas con la pareja
Los problemas de pareja pronto se pierden en la multitud de los problemas de la vida de todos los días y, por lo tanto, no son confrontados. Durante las vacaciones, sin embargo, finalmente salen a la superficie y no se los puede ignorar. Pronto comienzan las disputas. No son pocas las parejas que durante las vacaciones pelean a tal punto que se separan al regresar al hogar. También se ha demostrado que las tasas de separación y divorcio son significativamente más altas luego del verano. El 30% de todos los matrimonios terminan en divorcio luego de las vacaciones de verano.
Más atractivo sexual luego de las vacaciones
La carga erótica que emanamos luego de unas vacaciones aumenta el riesgo de una eventual infidelidad. Nos hallamos vigorizados, bronceados y mucho más atractivos. Además, nos encontramos más relajados y por lo tanto más abiertos a una conversación casual. Se sabe: una cosa lleva a la otra y, si no prestamos atención, podremos encontrarnos teniendo una aventura en menos tiempo de lo pensado.
Al borde de la separación luego de unas vacaciones
A causa de las dinámicas de pareja que se crean durante las vacaciones, muchas parejas se encuentran al borde de la separación cuando retornan a sus hogares. No tienen más que decirse, o no hacen más que pelear. Después de las vacaciones, deciden hacer una pausa de reflexión, sin separarse definitivamente. Esta nueva condición de “semi-libertad” puede comúnmente transformarse en un terreno fértil para una aventura.
Evitar la traición, ¿sí o no?
¿Te conviene luchar contra el deseo de tener una aventura? ¿O sería mejor seguirlo? Obviamente, nosotros no podemos ofrecer una respuesta que sea válida para todos. Una aventura puede reavivar tu relación y darle un nuevo impulso. Por el otro lado, también puede significar el fin de la unión de pareja. Por lo tanto, está bien considerar atentamente aquello que se pone en juego.
Si la traición es la opción ideal para ti, entonces no te queda más que encontrar a la persona indicada para una aventura. Por motivos de discreción, te aconsejamos no ir a la caza de amantes entre tus amistades o entre tus conocidos. El modo más simple para encontrar a alguien con quien tener una aventura es utilizar un sitio web de traición en línea. Hemos probado los mejores sitios para ti.
Deseo de una aventura también durante los inicios de una relación
Volvamos al caso que describimos al inicio: si también tú, como Patricia, te encuentras deseando encuentros sexuales con otras personas cuando la relación aún es joven o luego de vacaciones incluso muy breves, entonces quizá es el caso que debes echar una mirada crítica sobre tu relación de pareja. Hazte un examen de conciencia con toda sinceridad: si ya deseas una aventura luego de tan poco tiempo, ¿qué futuro podrá tener esta relación? ¿Crees que estaréis todavía juntos dentro de cinco, diez, o dentro de veinticinco años? ¿Y cuántas aventuras habrás tenido en todo ese tiempo?
Conclusión
A muchas parejas les llega el deseo de una aventura luego de haber pasado las vacaciones juntos. Este fenómeno puede observarse también empíricamente: las tasas de separación y de divorcio crecen vertiginosamente después de las vacaciones de verano y también el número de inscripciones a sitios web de traición en línea aumenta de forma significativa cada año luego de los recesos. Sin embargo, eres tú quien debes decidir si mantenerte fiel, tener una aventura o poner fin del todo a tu relación. Debes decidir por ti mismo/a. ¡Piénsalo bien!
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