Las consecuencias desagradables de la infidelidad

En el día de hoy, la infidelidad no es nada de especial.

Incluso si traicionar a la propia pareja no es la solución ideal, en algunos casos es seguramente mejor concederse una aventura antes que poner fin a un matrimonio de larga duración. Después de muchos años de vida conyugal es normal que la fase de enamoramiento pase y que la pasión primera deje el lugar a un profundo sentimiento de unión y confianza.

Aún así, esto normalmente acarrea también un adormecimiento de la sexualidad de la pareja. El estrés de la vida cotidiana, sobre todo al criar hijos, puede contribuir a relegar la vida erótica conyugal al olvido.

En el caso de muchas parejas casadas por un largo tiempo, suele hallarse un fuerte nivel de frustración en la pareja. Algunos porque no tienen suficiente sexo y otros porque se sienten obligados a tener más de lo que desearían.

Si no se desea condenar el matrimonio a la destrucción, pero al mismo tiempo se desea una vida sexual más activa y vívida, la única solución es la infidelidad. La mayor parte de las aventuras duran meses, e incluso años. Y si ambos amantes son conscientes de que se trata sólo de una aventura y nada más, entonces no hay nada que objetar.

Aún así, si te encuentras en una situación de este tipo, es recomendable que tomes en consideración un par de cosas. El engaño requiere siempre de precauciones. A continuación exponemos las peores consecuencias de la infidelidad y te suministramos consejos para evitarlas.

 

La traición es descubierta

Existen libros enteros sobre el tema que ofrecen consejos para no hacerse descubrir por la mujer o el marido. Por lo general se centran en la importancia de no ser vistos por nadie, de asegurarse de no recibir mensajes de texto o llamadas sospechosas, de tener siempre una coartada lista para justificar eventuales ausencias, de prestar atención y no emanar el aroma de un perfume o aftershave desconocido y, obviamente, no dejarse jamás atrapar en el acto. Para saber más, te aconsejamos leer nuestro artículo sobre el tema.

 

Tu amante comienza a invadir tu vida

No es raro que el/la amante se enamore, se torne insoportable y amenace contar todo a la pareja traicionada. Debes estar en guardia y no dejar que la situación degenere hasta ese punto. La mejor forma de evitar un resultado similar es tener aventuras sólo con personas que a la vez están comprometidas en una relación de pareja. Esto reduce al mínimo el peligro de enamoramiento. De cualquier modo, apenas notes que el amante se está tornando demasiado insistente, interrumpe inmediatamente la relación.

Muchos traidores experimentados declaran poner en uso esta estrategia desde siempre: después de pocos meses, por motivos de seguridad, ponen fin a una aventura y comienzan a buscar una nueva. Esto ayuda a reducir el riesgo de que al puro deseo sexual se sumen sentimientos.

 

Enfermedades

Evita llevar a tu hogar un “souvenir” de la aventura y usa siempre un preservativo para protegerte de sorpresas desagradables. Aún si parece una frase extraída de un texto de educación sexual, ¡tómala en serio! No es necesario correr riesgos inútiles e insiste en el uso del profiláctico. Esto vale también cuando estás en un apuro o si eres presa de una pasión explosiva e incontenible. Debes siempre tener tiempo para las medidas de protección. De otra forma, un día te arrepentirás.

¿Y si sucede de todas formas? Debes ser correcto en el confrontamiento con tu media naranja y evita informar hasta no estés seguro mediante exámenes médicos de que la aventura sin protección no ha dañado tu salud. ¡Esto incluye también la necesidad de un test de HIV!

¿Y si ya es muy tarde? ¿Has recibido un feo diagnóstico? En este punto hay sólo un camino por tomar: ¡el de la sinceridad! Busca el diálogo con tu pareja y explica cómo son las cosas. Abstente del sexo conyugal y alienta a tu esposa o marido a hacer una visita médica. Es posible que esto destruya tu matrimonio, o como mínimo lo dañe bastante. Siempre es mejor ser sinceros, antes de dejar que el cónyuge descubra la verdad de un modo aún más doloroso, cuando se de cuenta de que esa enfermedad ha sido causada por tu infidelidad.

 

Embarazo/paternidad

Y para terminar, el peor resultado posible de una infidelidad: la concepción de un hijo con tu amante. Por lo que parece, no se trata de un caso raro y es una situación muy difícil para todos los involucrados. Cierto, habría sido oportuno usar preservativo por varios motivos, no sólo aquel del embarazo. Sin embargo, es muy tarde para las buenas intenciones. El niño ha sido concebido y ahora es necesario considerar junto al amante qué se pretende hacer.

Una interrupción del embarazo es seguramente una decisión difícil de tomar y el hecho de que el niño sea fruto de una aventura no debería de por sí ser una razón para recurrir al aborto. Deberías considerar cómo afrontar la situación junto con la persona con la cual has tenido la relación extraconyugal. Puedes también dirigirte a diversos servicios de consulta. En última instancia, de todos modos, la decisión es tuya. Indudablemente, tu situación familiar jugará un rol importante. Si ya tienes una familia, entonces probablemente un hijo nacido de una aventura no sería ideal. Si, en cambio, no tienes hijos con tu esposa o marido, entonces quizá vale la pena evaluar si debéis criar el niño junto con el otro progenitor. Incluso si esto significara el fin de tu matrimonio.

Si eres una mujer y decides tener el niño, debes también tener el coraje de decírselo a tu pareja. No intentes de ninguna manera hacer pasar al niño como hijo suyo, ¡ni lo pienses! Innegablemente, se trata de una situación extremadamente lamentable que requerirá de una confesión vergonzosa por tu parte y que, en el peor de los casos, podría determinar el colapso de tu matrimonio. Pero hacer pasar al niño como hijo legítimo de tu marido sería una cosa deshonesta e injusta, sin contar que casi seguramente sería descubierta tarde o temprano, por ejemplo en caso de que no exista una similitud física, o si no hubiera compatibilidad del grupo sanguíneo. Además, ten en mente que el niño, una vez alcanzada la mayoría de edad, tendrá el derecho a conocer la identidad de su padre biológico. Para darte coraje, quizá te será útil saber que los hombres son más propensos que las mujeres a perdonar una traición, por lo que debes ser fuerte y hacer lo correcto.

 

Conclusiones

Una aventura puede ser el único modo para salvar un matrimonio de larga duración, protegiendo a la pareja de la frustración sexual. Aún así, es imperioso observar algunas precauciones si desean evitarse consecuencias desagradables. ¡Sé prudente!