¿No quieres que tu engaño sea descubierto? Entonces sigue estas 8 reglas de oro para que así puedas gozar secretamente de tu aventura sin poner en riesgo a tu pareja.
1. La palabra es plata, el silencio, oro
Junto a todos los errores de negligencia que un traidor comete y por los cuales su cónyuge le deja, estaría contar a demasiada gente su engaño. Este sería uno de los motivos principales por el que son pilladas las personas infieles.
Te divertías o todavía te diviertes con tu amante. Disfruta de ello, pero no se lo cuentes a nadie. Cada cómplice es el reflejo de un riesgo potencial sobre tu seguridad. ¿Cuáles son las ventajas de contar una aventura a excepción de una mención que conllevará una breve apreciación por parte de los colegas?
Página de "aventuras" galardonada
2. El culpable tiene una excusa
Lo has aprendido en las novelas de crimen: los sospechosos que tienen una buena excusa para el momento del crimen, quedan libres y no suelen ser condenados. Preocúpate y asegúrate de tener una excusa para el tiempo que pases con tu amante. Para ello, lee nuestros Consejos para las excusas perfectas de una aventura.
3. Ninguna huella en el lugar que haya sucedido
Te aconsejamos que quedes con tu amante en un hotel, lo más lejano posible de donde vivís ambos. Tampoco vayas con tu coche a la aventura porque, en primer lugar, no es práctico y, segundo, podrías dejar huellas en él.
No quedéis bajo ningún concepto en casa. Ya que de lo contrario le sería muy fácil a tu pareja demostrar tu infidelidad, por ejemplo, por los cabellos de otro color o a causa de la tapa del váter levantada.
Si, por el contrario – y excepcionalmente solo una vez – habéis quedado en casa, utiliza entonces 30 minutos para limpiar el apartamento meticulosamente y para buscar, eliminar y destruir cualquier huella.
4. Ninguna huella sobre el culpable
Fatal, si tu mujer o tu marido descubren desde el principio que los has traicionado. Carmín sobre la camisa, arañazos en la espalda, un chupón en el cuello: todos estos son un montón de maneras de ser descubierto. Por este motivo evítalos absolutamente y controla todas las excusas antes de entrar por la puerta de casa.
5. No dejes pruebas digitales
Enviar un email caliente a tu amante o tal vez hacerte fotos con la cámara digital y guardarlas son cosas muy divertidas. Sin embargo, todo eso hazlo con tu cónyuge, no con tu amante. Cada pieza de memoria y forma de comunicación digital es un riesgo para tu seguridad. Por tanto, utiliza para ello el ordenador de tu trabajo, no el de casa, y más todavía si no entiendes mucho de tecnología (palabras clave: eliminar el caché, eliminar el contenido de la papelera, encriptar los datos).
6. Evitar las pruebas
Destruye todas las pruebas antes de que caigan en las manos equivocadas. De hecho, incluso mejor: evita la aparición de dichas pruebas. Todo eso comprende las pistas digitales y todos los recuerdos, sobre todo las pruebas escritas como las facturas de hotel, recibos de restaurantes y extractos bancarios. Nuestro consejo es, por tanto, lo que sabemos que siempre ha llevado un engaño a buen fin: no conserves nada y paga todo al contado. Así evitarás preguntas críticas sobre tu próximo extracto bancario.
7. Móvil secreto
El móvil es casi indispensable para comunicarte con tu amante. Así puedes organizar vuestras citas de manera rápida, llamándole o enviando breves mensajes de amor a través de los SMS. Utiliza para todo eso un móvil secundario, que tu compañero/a no sepa sobre su existencia. De esta manera podrás estar muy tranquilo si tu pareja comienza a sospechar y controla atentamente tu móvil. Adquiere una tarjeta SIM de prepago y así no recibirás ninguna factura en casa. Enciende este teléfono solo cuando no estés en casa.
Como alternativa, también es posible tener en tu móvil una segunda tarjeta SIM para utilizarla en determinados momentos. Pero esto, de todos modos, es incómodo, porque no podrás estar localizable en ese número. Atención: borra siempre todos los mensajes compartidos con tu amante y elimina también su teléfono del registro de llamadas (sin cancelar toda la lista, obviamente).
8. No hay ningún conexión entre el culpable y la víctima
En los casos penales, cuando no existe una conexión entre el culpable y la víctima, todo se vuelve mucho más complicado para los investigadores. Aprovecha este hecho y no tengas una aventura con alguien dentro del círculo de tus amigos y por supuesto, nunca entre los amigos de tu cónyuge. Busca, por tanto, una pareja desconocida para tu engaño. Con este propósito podemos utilizar internet. Existen algunos sitios especializados en mediar aventuras y engaños.
¡Elígelos rápidamente desde nuestra Comparación entre los mediadores de aventuras!
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